29 junio 2008

Tristeza


Lo siento por todos aquellos -Puigcercòs, Urkullu...- que al ver a su país ganar la Copa de Europa de selecciones, sin embargo, se angustian por ello. ¡Qué triste debe de ser eso!

7 comentarios:

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Pero esos son cuatro gatos, lo bueno fue participar de la alegría de todo el resto de los ciudadanos catalanes. Ya sabíamos que no tiene nada que ver la Cataluña real con la virtual: ahora está confirmado.

A. Sánchez dijo...

Más que confrimado, parece ser que Canaletas y Pza. España estaban llenas de gente roja, y no precisamente del espectro político.

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Ya era hora de que las tornas empezasen a cambiar.No sé si me precipito al ver en toda esta eclosión de gentes rojas,como tú dices, el principio de un cambio hacia la racionalidad. Y un fin de la etapa nacionalista, que, como es natural, no se producirá de hoy para mañana, pero que ante la evidencia del perjuicio que las actitudes fascistoides le están aportando a Cataluña, tanto en el terreno cultural como en económico, tiene que producirse desde ya.

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

Si que tienen que estar tristes, yo les deseo que estén igual de tristes que yo me siento de feliz, al menos, que no es poco.

A. Sánchez dijo...

Por lo que he visto en tu bitácora la alegría es tremenda, igual que la mía y la de toda España, según se vió ayer por TV, así que, si tienen que sentirse en proporción, apañaos van...

A. Sánchez dijo...

Amigo muyseño...esto y la eclosión -la copio de la Shiki- de partidos rebeldes ante lo que ocurre puede obrar el milagro, con tiempo, como bien apuntas.

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Pues a ver si llega ese milagro laico.

Lugar: Barcelona, Spain